10 razones para amar y odiar a Daniel Radcliffe

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Es solidario. Pertenece a una campaña en apoyo al hogar infantil DEMELZA HOUSE.	Fuma como un carretero, Entre una cajetilla y una cajetilla y media diaria, es decir, entre 20 y 30 cigarrillos diarios
Ha donado en más de una ocasión objetos personales para subastas con fines benéficos.	Ha criticado duramente a la corona Británica, en especial, al Príncipe Guillermo. Aunque, no se si esto es un defecto, o una sensatez total.
No se gasta dinero en colecciones de objetos valiosos, solo en libros, CD, o DVD. Vive lo más alejado posible del lujo.	No tiene pelos en la lengua: dijo que la gente que se compraba colecciones de cochecitos solo por el valor de estos, le causa nauseas.
Es muy humilde y sencillo.	Es muy nervioso, tanto que sufre de hiperventilación
Algunos de sus copañeros, como Robert Pattinson, han declarado que envidiaban su madurez.	Otro de sus defectos, o pecados capitales, es la soberbia.
A menudo, ha denunciado con sus opiniones hechos como el rechazo social, el racismo, o la globalización.	No solo ha criticado a la realeza Británica, sino también a la realeza en general, y a la gente que lo sigue. También ha criticado a Tony Blair, a quien llegó a comparar con Cornelius Funge.
Se desnudó en el teatro.	Se desnudó en el teatro.
Es todo un intelectual. Le gusta escribir, y leer poesía. Él mismo escribe poesía.	Es muy bajito, mide solo 1’65.
Le califican como cariñoso, dulce, atento, y muy perfeccionista.	También es muy despistado.
Tiene un gran talento como actor, la crítica lo elogió por sus actuaciones en “Equus”, tanto en Londres como en Nueva Cork.	Es (o al menos, era) adicto a los videojuegos.